Damas y caballeros, niños y niñas este viaje a llegado a su fín. Como todos sabréis no me fué muy bien en la competición y perdí el primer combate contra Armenia. No me salió demasiado bien vamos. Muchos días y poca competición.
Con un poco de perspectiva, ya en Madrid y esperando por el vuelo que me lleve a Vigo, puedo decir que la universiada ha sido una experiencia muy, pero que muy enriquecedora. He entrenado, competido, aprendido, conocido, divertido, sonreído y un millón de participios más. Hoy cuándo hemos aterrizado en España de nuestro vuelo desde Qatar, me ha parecido que hubiese pasado un año completo. Tenía ya, un recuerdo vago, solo flashes de la villa, de la gente, de los momentos. Cómo si mi memoria ya hubiese seleccionado con qué quedarse de toda la experiencia vivida. ¿Y sabéis que? De los malos momentos ha quedado poco...
Han sido algo más de 24 días en los que poco a poco os habéis unido un montón de personas a este blog, del que por cierto me siento bastante orgulloso. Personas con las que he compartido un poquito de mí, y un poquito de mi experiencia en Shenzen. Aunque nunca lo leerán, me gustaría agradecer a todos los voluntarios (muchísimos) lo bien que nos trataron. Por mucho que lo intente, jamás lograría explicaros lo especial que se siente alguien cuando construyen una ciudad practicamente para tí. Cuando toda una población se vuelca con un proyecto que básicamente consiste en que te sientas bien para rendir al máximo en la competición.
Y por último, y para no ponerme sentimental, os contaré un fenómeno del que había oído hablar pero jamás hubiese podido imaginar. Los últimos días, en la calle central de la villa, frente al comedor de los atletas, se formaba una gran masa de seres humanos que cambiaban su ropa. Es quizás una de las experiencias más bonitas que me llevo. Fue en mi opinión la máxima expresión de lo que es el ser humano. Dejando a un lado, la influencia de la publicidad (lo que por otra parte me alegra, porque significa que a lo que me dedico tiene un sentido en todas las manifestaciones de comunicación entre las personas.) lo único que había allí eran seres humanos comunicándose. Blancos, negros, chinos, árabes, altos (muchos), bajos, gordos (no muchos), flacos, tacaños, derrochadores, amables y huraños. Un montón de gente que no tenían nada en común y que se entendían a la perfección. Fue para mí grandioso, ver como las camisetas con las banderas cambiaban de unas manos a otras sin darle más importancia de la que realmente tienen. Unos y otros lucían con orgullo sus propias marcas nacionales al lado de las de las que acababan de conseguir. Aquí y allá un apretón de manos o una sonrisa; y si no hay trato? Un lo siento y otra sonrisa. Seres humanos comunicándose ni más ni menos.
Y en medio de todo aquello, yo, aprendiendo más de marketing y publicidad que en un año de carrera. Contacto con el público, posicionamiento, marca, servicio post-venta y comunicación, sobre todo comunicación. Qué conste que parece que no se me da del todo mal lo del trueque. XD
Cómo bien dice la descripción de este blog, mañana se convertirá en un blog sobre publicidad y deporte, mis dos pasiones. Y cómo la villa de la universiada, cambiaran los carteles y se moverán los muebles, pero lo que vivimos juntos en este viaje, quedará para siempre, guardado en nuestra memoria y en nuestro corazón, y, al menos en mi caso, volverán siempre acompañados de una sonrisa.
Muchas gracias por seguirme todos estos días y seguís estando invitados a este lugar dónde el deporte y la publicidad caminan de la mano...
